Decía Dixebra hace más de 20 años “¿Quién yera necesariu? ¡El frenti folixariu! ¿La nuesa ideoloxía? ¡Folixa cada día!” y no es baladí el asunto, si lo dice Dixebra, que toca en todos los saraos habidos y por haber en Asturias desde hace ni se sabe, tiene que ser verdad.
El frenti folixariu mantiene una actividad frenética desde hace muchos años y parece que va a más. Por él no pasa el tiempo y es capaz de renovarse constantemente, hasta ampliar las huestes a límites insospechados.
Aparece y se manifiesta con extrema dureza una o incluso dos veces al mes. Con la misma dureza que los grupos musicales que los inspiran y convocan, narran en sus canciones. Gritos y consignas contra los políticos y la política, contra los nazis y facciosos, contra la policía y la represión. Cantares recordando y exigiendo emular antiguas y gloriosas batallas del pasado de un movimiento obrero que ni conocen ni esperan conocer. Cuentan las malas lenguas que en ocasiones, van más allá de la pura consigna y algún valiente, algún héroe de la vanguardia folixera, llega a aparecer disfrazado de minero en los conciertos o revienta una cerveza – ¡o peor¡ un vaso de cacharro – contra el suelo mientras maldice al capitalismo.
Y fin del asunto porque en la vida verás a un integrante del frenti folixariu participando de una lucha vecinal, parando un desahucio, involucrándose en algún conflicto laboral, peleando contra la contaminación, etc. En fin, participando de alguna de las luchas que los músicos a los que corean describen en sus canciones y que son en definitiva, semilla de las grandes gestas que se cantan en los conciertos con el puño en alto.
En esos conciertos en los que, entre cerveza y raya, ha hecho el frenti folixariu la revolución unas 60 veces en lo que vamos de siglo, pero solo en los conciertos, que como dicen otros ídolos del frenti, Lehendakaris Muertos “la revolución nos pilló de resacón”.
Pero las cosas como son, aveces el frenti sale del concierto, eso sí, solo si la movilización la recogen, fomentan y marcan esos mass media que siguen las masas aborregadas pero ellos no, que para algo son la vanguardia iluminada de la clase obrera.
Ahora llega el 1º de Mayo, que es como la Nochevieja de los integrantes del frenti, la gran fiesta del año y en la que ir de folixa en folixa cantando a la revolución. Por fortuna para el mundo pero por desgracia para ellos, pasó la época de los grandes macroconciertos en los que sacar pecho al grito de “ Santa Barbara Bendita” – como poco – . Quedarán reductos de folixa anticapitalista en los años venideros, con mucha pasta, apoyos y pocas ganas pelea y es que “Frente folixariu, frente guerrileru defende los drechos del pueblu folixeru” y cuenta con apoyos, pero por fortuna, las cosas están empezando a cambiar.
¡Menos mal que la revolución la harán los que escuchan reaggeton! Si del frenti folixariu dependiera igual montábamos un tributo a La Polla y nos dejábamos de historias.